Venía tras una larga noche,
venía tras una oscura estela,
venía sin que nadie se diese cuenta,
venía y no paraba de causar penas.
Avanzaba entre las tinieblas,
avanzaba entre el furor de los demonios,
avanzaba atravesando corazones,
avanzaba entre la desesperación y el odio.
Imposible era de parar,
imposible era de frenar,
imposible apagar esa pena
e imposible era abandonar.
Se llama de muchas maneras
se contagia de muchas formas
te afecta siempre de una
y te mata siempre por la otra.
Se alegran los que lo tienen,
lloran sus parientes
todo el mundo llora
pero nadie se acerca al paciente.
Y como antes dije
esa sombra se cernió sobre la persona,
esa sombra emborronó sus dones
esa sombra mató sus ilusiones
pero lo que es peor
para él la vida, carecía de razones.
De un sólo plumazo cambió de vida,
y por una sola causa encontró su cenit,
creedme lo que digo,
el creía que iba a ser libre,
pero al final la muerte se lo llevó de calle.