Nunca lo adivino,
pero siempre lo siento,
viene por destino,
pero sin él saberlo.
Traería lágrimas del infierno si pudiera,
oprimiría mi pecho por tenerlo en mis garras,
suplicaría y maldeciría en todo el ámbito de mi pensamiento,
se me escapa sin quererlo, ¡ No quiero poseerlo !.
Viene por sentimientos,
y me deja sin tiempo,
cazaría cometas por un poco de vida,
arrasaría la tierra por esos recuerdos,
pisaría la luna sin remordimientos
¡ Oh Dios mío !, lo que daría por tenerlo.
Mezquino corazón, no hagas uso de mi razón,
no me obligues a hablar sin pensar,
no me des la cara de la falsedad,
quiero conocer ambas laderas,
lo único que quiero es la verdad.
Pero yo me engaño y enmascaro,
no quiero saber lo que soy,
me escondo en enredos de palabras,
me esfuerzo por perfeccionarlas,
intento crear distintas vidas
para luego disecarlas
y engullirlas en mi persona,
tan cruel es el poeta,
tan dura la realidad,
existen miles de escritos,
de engaños, de alabanzas y de esperanzas,
pero todos escritos por manos pecaminosas,
presas del corazón,
amenazadas por su sin uso de la razón,
yo no me quiero dejar llevar,
pero también he sido asesinado,
soy el creador de este escrito,
pero también su servidor.
Todo iba en torno al amor,
pero mira como cambia mi color,
perdonadme por lo que escribo
pero éste ya no soy yo porque
para mí no hay un yo sino
un ellos que marcan mi pasado,
que afectan a mi futuro y que,
me seguirán y me amenazarán
hasta mi tumba de humano.
El amor es un engaño,
es aliento de los fallecidos de un pasado,
es invención de los que no tenían nada,
es el regalo que reciben los ilusos sin esperanza,
es decir, los que no aspiran a nada.
Este amor no se puede tener,
es venenoso, pero mata la sed,
y por eso la gente lo alaba,
porque no saben vivir sin él,
sabed que el amor es putrefacto,
es cosa de antaño,
lo único que le hace a la persona es daño.
Si alguno ve la secuela del amor,
que la arranque de su corazón,
que la queme sin reparo,
porque una cosa si es cierta,
el amor no tiene perdón.
Este color de intenso rojo,
se puede hacer azulado como por arte de magia,
la personalidad es infinita
y los cambios frecuentes,
mirad sino me creéis creyentes.
Si por un momento hubiese amado,
saltaría de alegría, me acordaría del pasado,
traería pensamientos de tu figura,
dibujaría tu pensamiento,
afirmaría mi locura.
El amor es como la brisa,
suave y a la vez cálida,
que te da frescor pero te duerme,
y yo quiero irme con esa brisa,
quiero viajar con ella al más allá,
quiero dejar esta vida,
para emplearla toda en amar,
dichosos los que ríen,
dichosos los que lloran,
dichosos los que sufren o se divierten,
dichoso el amor.
Todos ellos aman,
porque todos poseemos esas alas,
pues el amor es libre de pensamiento,
no tiene fronteras,
pero igual de fácil es,
obtenerlo como perderlo.
Si lo consigues guárdalo,
cuídalo como a un tesoro,
y no se te olvide esto:
Con amor naciste y viviste,
pero con rencor falleciste,
ya que no sabías lo que tenías,
y apostaste por parte mía.
Gran error fue ese,
pues yo soy creador,
soy diversidad, soy inmortal,
en definitiva, ven al infierno,
y me verás.